Los instrumentos de Solar Orbiter
El satélite Solar Orbiter está especialmente diseñado para apuntar en todo momento a nuestra estrella, por lo que su cara frontal permanecerá protegida por un parasol. La nave también se mantendrá refrigerada gracias a la colocación de unos radiadores especiales, que disiparán el exceso de calor al espacio. Los paneles solares y el sistema de comunicación se han tomado del diseño de la misión BepiColombo de la ESA a Mercurio.
Solar Orbiter transportará una serie de instrumentos muy sofisticados y ligeros, con un peso total de 180 kg. Uno de los conjuntos estará formado por detectores para la observación de partículas y eventos en las inmediaciones de la nave, incluidas partículas cargadas y campos magnéticos del viento solar, ondas magnéticas y de radio del viento solar, y partículas cargadas de energía.
El otro conjunto de instrumentos observará la superficie y la atmósfera del Sol. La mejor forma de ver el gas de dicha atmósfera es mediante la potente emisión de rayos ultravioletas de onda corta. Así, Solar Orbiter contará con un generador de imágenes de alta resolución y del Sol completo, y con un espectrómetro de alta resolución. La atmósfera exterior del Sol se revelará mediante coronografías de ultravioleta y luz visible que ocultarán el disco brillante del Sol. Para examinar la superficie en luz visible y medir los campos magnéticos locales, Solar Orbiter también contará con un magnetógrafo de alta resolución.