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Corrientes de la superficie marina  La principal fuerza impulsora de las corrientes de superficie es el viento. Los vientos que impulsan la Corriente del Golfo son los vientos del Oeste o contralisios. Estos soplan en dirección al este y penetran hasta una profundidad de aproximadamente 200 metros, arrastrando a gran distancia y velocidad el agua de la superficie. Las corrientes y los vientos se miden ambos como vectores de velocidad. Su magnitud, por tanto, se expresa en distancia recorrida en el tiempo, y se mueven en direcciones cardinales.
Los campos de velocidad de la Corriente del Golfo derivan de los datos casi en tiempo real del radioaltímetro. Un mapa de velocidad geostrófica absoluta combina campos de velocidad hacia el norte y hacia el este para formar una estructura de corrientes de superficie significativas. Las velocidades de las corrientes se representan con flechas y/o códigos de color. La longitud de las diferentes flechas muestra la magnitud de la velocidad, al compararla con la flecha de referencia de 1 m/s dibujada junto a la barra de colores. La dirección en la que apuntan las flechas es la dirección de la corriente. Una flecha que apunta a la derecha podría indicar, por tanto, un flujo hacia el este.
Para poder observar la influencia de los vientos en las corrientes de superficie, es interesante comparar los campos de velocidad de la superficie marina con los campos de velocidad del viento medidos por los escaterómetros. Esencialmente, los escaterómetros radar funcionan transmitiendo un pulso de radiación de microondas hacia la superficie de estudio, y midiendo la energía reflejada. La comparación de ambos parámetros es muy útil en los estudios climatológicos. Last update: 25 junio 2013
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