El 28 de diciembre se cumplirán 2 años desde que GIOVE-A, el primer satélite Galileo, fue lanzado en un cohete Soyuz desde Baikonur, Kazahistan. Este satélite ha demostrado el enorme progreso que Europa ha realizado en sus sistemas de Navegación por Satélite.
Desde Enero del 2006, las señales de Galileo han sido emitidas por GIOVE-A y recibidas en todo el planeta. En el laboratorio de la ESA de investigación y tecnología de navegación, que se encuentra en Holanda, se revisan tanto el estado de los instrumentos a bordo del satélite como los receptores que se encuentran en tierra y los datos recibidos. Estos tests y calibrados han permitido a los especialistas confirmar el éxito de la misión, lo que es una buena indicación del funcionamiento del resto del programa.
El siguiente paso, está ya en marcha: el GIOVE-B (el segundo satélite experimental) está en las últimas fases de preparación en las instalaciones de la ESA, para su lanzamiento el año 2008. Este segundo satélite Galileo, contará con el reloj atómico más preciso jamás lanzado al espacio, el cual contribuirá a mejorar la calidad de las señales del futuro sistema Europeo.
Tras GIOVE-B, la validación en orbita será complementada con el lanzamiento de otros 4 satélites más, el mínimo necesario para obtener las medidas de posición en un sistema de navegación por satélite. Estos satélites se construirán en diferentes lugares de Europa y serán lanzados a finales del 2009.
Para conseguir el nivel operacional óptimo, Galileo necesita contar con 30 satélites y una red de estaciones en tierra alrededor de todo el planeta. Esta fase acaba de ser confirmada recientemente tras la decisión de la Unión Europea de acordar un paquete de financiación de 3,4 billones de euros y de designar a la ESA como la organización técnica responsable de completar el desarrollo del sistema Galileo, el cuál estará finalizado en el 2013.
Mientras tanto, otro sistema de navegación europeo se encuentra en su fase pre-operacional, El Sistema Europeo de aumentación de navegación por satélite, EGNOS, consiste en una red de estaciones en tierra que mejora las señales GPS y envía estas mejoras a través de satélites geostacionarios. EGNOS podrá determinar una posición con una precisión de 2 metros. Originalmente concebido para mejorar la seguridad vial, EGNOS es accesible para todo tipo de aplicaciones y se ha convertido en un paso clave en el camino hacia Galileo.
Con estos avances, la Comisión Europea y la ESA están construyendo de forma progresiva un Sistema Civil capaz de ofrecer ayuda y guia de navegación mundial.
Thank you for liking
You have already liked this page, you can only like it once!