En la oscuridad
El curso de formación geológica en campo Pangaea ya está de vuelta con su tercer módulo.
Diseñado para que astronautas y exploradores aprendan sobre la formación de planetas y la detección de signos de vida, y dirigido por científicos europeos, Pangaea combina clases teóricas con salidas a lugares de interés geológico.
Los participantes en la edición de este año incluyen al astronauta de la ESA Thomas Reiter, el cosmonauta de Roscosmos Sergei Kud-Sverchkov y el experto de la ESA Aidan Cowley. Han recibido instrucción sobre procesos geológicos, cómo interpretar las formaciones rocosas y las herramientas de exploración, antes de pasar al trabajo de campo para poner en práctica sus conocimientos.
En Alemania, el equipo comenzó por estudiar los cráteres de impacto en el mejor conservado del mundo: el cráter Ries. Después, el equipo estudió los paisajes de aspecto marciano del cañón Bletterbach, en los Dolomitas italianos.
Algunos de los ejercicios incluyeron la descripción de rocas, la identificación de minerales y el bosquejo del paisaje como forma de leer su historia al detalle.
Del 11 al 16 de noviembre, el equipo explorará el paisaje más marciano que se puede encontrar en la Tierra: Lanzarote, en las islas Canarias.
Se trata de uno de los mejores lugares de nuestro planeta para comprender la interacción de la actividad volcánica con el agua: dos factores clave para la búsqueda de vida.
A lo largo de su terreno irregular se hallan numerosos tubos de lava, como el que aparece en la imagen.
Estos tubos son estructuras subterráneas que también se encuentran en la Luna y Marte. Dada su ubicación, pueden proteger adecuadamente de la radiación. Además, pueden contener aguas subsuperficiales, por lo que resultarían interesantes para la búsqueda de vida microbiana extraterrestre. Así, constituyen el lugar de estudio idóneo para los futuros exploradores planetarios.
Durante Pangaea-X, del 19 al 23 de noviembre, el equipo llevará a cabo una misión de envío de muestras para probar tecnologías de cara a futuras misiones espaciales.
De esta manera se sentarán las bases para un emocionante experimento que tendrá lugar en 2019 en la Estación Espacial Internacional: un astronauta controlará desde la ISS un róver en Lanzarote para probar la robótica y las comunicaciones de retransmisión, la logística del control de misiones y las capacidades robóticas para futuras misiones en la Luna y Marte.
Es posible seguir esta edición de Pangaea en redes sociales y estar al día de las actividades de campo en su blog.