Venus
Venus es el segundo planeta respecto al Sol, por lo que siempre se le ve cerca de él en el cielo. Aparece como una “estrella” brillante de la mañana o del atardecer, y en el cielo nocturno es el objeto más brillante después de la Luna. Si se utiliza un telescopio se puede ver que atraviesa fases, al igual que la Luna.
El intenso brillo de Venus se debe a que está recubierto de nubes que reflejan gran parte de los rayos del Sol. Sus nubes de tono amarillo están formadas de azufre y ácido sulfúrico. En ciertos aspectos, Venus es el hermano gemelo de la Tierra. Tiene aproximadamente el mismo tamaño y está compuesto por los mismos materiales rocosos. También se acerca a nosotros más que ningún otro planeta. Sin embargo, está cubierto por una densa atmósfera de anhídrido carbónico, es decir, el mismo gas que exhalamos al respirar. Es una atmósfera tan espesa que caminar a través de ella sería como abrirse camino en el agua.
El anhídrido carbónico atrapa la mayor parte del calor del Sol. Las capas de nubes también actúan como cobertura. Como consecuencia se produce un “efecto invernadero extremo” que hace que la temperatura suba hasta los 465C, calor suficiente para fundir el plomo. Por esa razón, Venus es aún más caliente que Mercurio.
Un visitante en Venus que no tuviera una protección adecuada moriría de forma instantánea, aplastado por la inmensa presión atmosférica; sofocado por la atmósfera; achicharrado por el calor; y disuelto por el ácido.
La superficie de Venus se ha cartografiado mediante radar. Los mapas muestran millares de volcanes y cráteres formados por impactos. Hay dos mesetas principales y una cordillera más alta que el monte Everest.
Decenas de naves espaciales han visitado Venus, pero aún quedan muchos misterios sin resolver. El satélite Venus Express de la ESA ha estado en una órbita cuasi polar alrededor del planeta desde su llegada en abril de 2006. La mayoría de sus instrumentos han estudiado la densa atmósfera y sus nubes veloces, y han investigado el efecto del Sol en el planeta. Por otra parte, su sensor de infrarrojo también ha sido capaz de cartografiar parte de la superficie y de mostrar la posible existencia de volcanes activos en el vecino de la Tierra.
Última modificación 12 enero 2011